Cómo se sentirá
tener un hombre que te elija. Que a pesar de todos tus problemas y limitaciones
te siga eligiendo. Que no quiera perderte, que te necesite en su vida a
cualquier precio.
Sentirse amada
debe ser una de las sensaciones más hermosas. Por alguna razón esa sensación me
esquiva, dobla siempre antes de llegar a mí.
Se me
acerca, me torea, a veces me duró un rato, me mira fijo, y se va.
O los
hombres necesitan mujeres muy diferentes a mí, o tengo más defectos de los que
soy capaz de ver.
La macana
es que a esta altura no puedo cambiar, ni quiero.
No me
imaginaba sola en esta etapa de mi vida, me hacía con un compañero de rutas, de
viajes, de risas, de sábanas, de películas y música. Pero todo en uno.
En algo la
debo de haber pifiado, o no me tocó en suerte. O elijo mal. O simplemente, no
me elijen.
Ajo y agua.
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