En algunas pocas ocasiones, alguien descubre el lugar exacto que te produce cosquillas, y te desata una carcajada.
En otras, te descubre la frecuencia de vibración, o la localiza de pura casualidad (si es que damos entidad a las casualidades) y se provoca una música compartida inigualable.
Otras pocas veces te sorprenden disfrutando del mismo atardecer, el mismo mar, como queriendo el mismo paisaje.
O quizá elige esa canción que sin siquiera saberlo, tenías ganas de escuchar.
Podría darse la posibilidad de que adore los mariscos y la rúcula...aunque sería un poco remota en el país del asado.
Sería fantástico si quisieras cenar viendo el s03e11 de esa serie...y el otro no desee el noticiero de la noche.
Cualquiera de las opciones sería maravillosa.
Pero si además, como yapa, te descubrió el lugar ese en el pecho adonde se esconde el alma...¡olvidaatee!
No soy una escritora, pero admiro a quienes sí saben hacerlo. Esa sensación de "cómo logró decir exactamente lo que yo pienso, con esas palabras perfectas", se intensifica cuando se lee a determinados autores. Robando Letra es eso: una recopilación de textos de esos grandes, que lograron hacerme sentir que yo nunca podré expresarme como ellos, pero puedo admirarlos, citarlos, disfrutarlos y pretender que otros los disfruten conmigo. Y a veces yo me animo a intentarlo, por qué no?.
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