21 de agosto de 2008

Happy Weekend

Fin de semana largo, como quedan pocos hay que aprovecharlos. Surgió sobre la fecha la idea de ir a Mar del Plata, una ponía auto, otra depto. Al consultar, mis viejos también iban al depto. Así que éramos multitud, pero mis lectores sabrán que la presencia de mis padres dista de ser un problema!.

Allá salimos, sábado 7:30 de la mañana, la “pingaza” (manejando el C3 de su hijo), la “estrafalaria” y yo (no me autoapodo, elijan nomás). Dejamos en La Plata a la doctorcita por razones laborales. La indicación de la pingaza fue: “poco equipaje, son 3 días”. Ok, yo solo mi mochila, cuando abren el baúl el bolso de la estrafalaria ocupaba medio baúl…a veces le cuesta entender. La pingaza metió un cartel de venta de un lote que había que colocar + una estufa para reemplazar la de su departamento. Entendí yo sola?.

Me tocó el asiento trasero por cuestiones de edad, mis acompañantes son “señoras mayores” JE!. Pero finalmente tuve “compañía”: el “placard” y la “alacena”. El primero consistía en la pila de camperas, chaleco, gorrito, mantita, carteras…y el segundo en canasta con mate, repasador, servilletas, yerba, galletitas…(íbamos livianitas, no lo olviden). Los primeros kilómetros fueron de una verborragia interminable, yo hablo, pero NI imaginan a las otras dos!. No terminamos a las trompadas porque la ruta estaba demasiado transitada. Cuando logramos el primer vacío palabreril empezamos con la música, las dos seguían hablando y yo cantaba. Un lujito.

Llegamos temprano, pero había que pasar por el depto. de Mogotes de la pingaza a dejar la estufa e ir a colocar el cartel. Aquí ex - esposa de martillero tomó las riendas del asunto y mientras mis cumpas cortaban alambre yo fijaba el cartelito. Quedó precioso. Entre tanta cosa llegamos al departamento junto con mis viejos que venían de Carhué. Descargamos y fuimos de compras: dos leches, un desodorante, pan y 4 botellas de buen vino (eso lo aprendí de la doctorcita). Decidimos salir de caminata bajo la llovizna, a las dos cuadras perdimos a mis viejos. Obviamente nos impulsaban intereses diferentes y velocidades muy distintas: nosotras parando en todas las vidrieras y mis viejos caminando como si estuvieran por ganar la maratón. Entre otras cosas seguía la charloteada, hasta que la pingaza medio ofendida entró en un negocio, agarró cinta scotch y se cruzó dos trozos en la boca, y así salió por la peatonal. Tranquilos, le duró unos 10 segundos. Yo me emocioné con unos zapatos violetas y las chicas con polleritas rectas y puloveres clásicos. Naa que ver!, pero allá iba cada una feliz con su compra.

Esa noche cenamos los 5 en Montecatini, compartimos platos, menos la estrafalaria que acotó: yo quiero lomo a la pimienta pero para mi sola. Y se lo mandó nomás. Bien regado, pero al volver a casa recordamos las botellas adquiridas y sirvieron de “postre”. Cabe acotar que mi madre se había tomado un whisky antes de salir…

Domingo: desayuno liviano y tempranito y partimos hacia Sierra de los Padres las 3. Primero pasamos por el depto. de la pingaza donde la estrafalaria se mandó la conexión de la nueva estufa, ahí entendimos por qué nos llevó a nosotras: necesitaba una para colocar el cartel y otra para la estufa. Zorra!.

La Sierra, bello lugar, más gastos. Compras varias: el licor de chocolate granizado para retribuirle a Pablo, las hojas de parra de la pingaza para los niños envueltos, mermelada de regalito para mis viejos, y los gorros!!!!. Me calenté con un gorro de conejo azul, y la estrafalaria con uno blanco. Me mató que no aceptaran débito, sino me lo traía, pero hay documento fotográfico. Entre tanto localcito de artesanía perdimos a la estrafalaria, que apareció “llorando a los gritos” (si señores, de acá al Maipo) “¡¡quiero a mi mamáaa, me perdí!!!. Decidimos con la pingaza que no la conocíamos y rumbeamos para el auto.

Almuerzo: sándwiches de miga y cerveza en Laguna de los Padres, ver foto. El señor que la tomó osó acotar que las señoras estábamos “re-puestas”. Le aclaramos que hacía falta bastante más que una botellita de cerveza para “re-ponernos”.

A la vuelta nos “tiramos un ratito”, léase llegaron mis viejos y estábamos las 3 torrando. Y después salimos de compras. Nos habíamos quedado calentitas con los sombreros, no conseguimos de piel de conejo pero…vean las fotos. No sé si alcanzan a notar el de la estrafalaria: se paseó por todo mardel con el ganchito de plástico de colgar sujeto a su gorro!!. Se dedicó a contabilizar cuantos le avisaban de su ridiculez. Y lo continuó en La Plata: nos reunimos el martes y se apareció en el bar con su gorro…más la antena plástica incorporada. Yo tuve mi intento fallido de conseguir las “bandanas de Naruto” que me había pedido mi hijo para su cumpleaños, eso sí, en el intento me mandé una discusión muy entretenida con un supuesto entendido en la materia que según él también vendía “cine arte”…a la segunda consulta huyó enojado diciendo que estaba apurado!. En la feria de artesanos hicimos la compra más importante, como en nuestro grupo de conocidos comunes nos tildaron como “el serpentario” (no se nos ocurre por qué…) decidimos comprarnos los anillos de membresía y traerle uno a la doctorcita que no pudo venir. Ver foto!.

Mis viejos al cine, nosotras rabas con fritas en casa. Y vino, obvio.

Lunes: a cargar equipaje y partir a desayunar en Waikiki. Fotitos, café rico, lindo lugar, pero salgamos temprano así evitamos el tránsito posterior. Qué ilusas!!. Pasadita por el puerto a quemar los últimos pesitos en conservas. Más “amables” avisando a la estrafalaria que llevaba una perchita en su gorro.

Viaje de vuelta: capítulo especial, hasta Maipú todo muy lindo, muy completo. Paz, buena música, poca charla, el placard se transformó en almohada. Pero la pingaza es una tipa amable, al pasar el peaje ofreció parar a fumar un cigarrillo y preparar el mate tranquilas, total eran 15:30, la ruta estaba tranquila y nos merecíamos que el regreso fuese parte de las mini vacaciones. Eso sí: el C3 no arrancó NUNCA MÁS. Autovía y la PMQLP!!, no nos daban ni media bola, la pingaza discutía con un tal señor supervisor, el tipo no aportaba nada, la otra amenazaba con carta documento. Por allá logramos: que nos empujen dos policías…nada…que nos manden un mecánico…nada…que puenteen la batería…nada. NADA!. Y se venía la nochecita. Llamemos al seguro: La Caja y la CdetuM!!!. “tenemos 2 o 3 horitas de demora, el exceso de kilómetros son 900$ a pagar antes de cargar el auto, y llevamos solo dos pasajeros”. DIVINO!. Nos sugirieron conseguir una camilla particular (el camioncito ese que carga el auto atrás) lo antes posible porque más tarde iba a ser imposible. Allá apareció Juan (te queremo Juancito, te queremo!!!). Aceptó llevarnos a las 3 en la cabina…y cobrar 700$ al bajar el auto en La Plata. A las 19 el auto estaba sobre la camilla y nosotras apiladas, yo contra Juan, una pata entre las de él y la otra encima de las chicas, con la palanca de cambio entre mis piernas, la pingaza aplastada a mi lado y la estrafalaria incrustada contra la puerta. Creo que todavía tiene la marca del levantavidrios.

El viaje…un primor. Juan con sus 48 años empezó “disculpe señora, pero tengo que poner tercera”…y al llegar era “AHH Ceci, pero te gustó la tercera eh!!”. El pobre tipo nos soportó 230 km de los cuales la mitad fueron a paso de hombre porque las previsoras terminaron agarrando la peor congestión posible. Las anécdotas de Juan no las voy a contar por si lo lee algún familiar o amigo…pero GRACIAS JUAN!.

El martes a la noche en el bar, hicimos entrega de su anillo a la doc, vimos fotos y brindamos por nuestro finde. Quiero más. :)

Falta la foto de Juan y su camilla, cuando la reciba la agrego.













17 comentarios:

Anónimo dijo...
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Anónimo dijo...

un viaje de pelos!!! lo mejor fue ver sus caritas de emocion al volver!!! impagable...incomparable!!! me alegro que la aventura hoy sea un muy buen recuerdo!!!...esos anishossss! me mataron!! jajaja besossss!!! y gracias por invitarme a pasar...
ojos_de_mar

Cecilia- dijo...

Gracias Luján!, eso sí, las caritas al volver no las viste porque falta la foto de la vuelta en grúa...ya llega, paciencia!
besoss

Anónimo dijo...

Ceci... asique " estrafalaria " eh? jajajajajajajaja Buenisimo el relato!!!!!!! Rosy!!!!! muak!!

Cecilia- dijo...

Rosy, lo mío era peor, ese apodo lo eligió la otra que es más diplomática.
besotes

LORD MARIANVS dijo...

La pingaza, la estrafalaria ¿y vós no tenés apodo? Ahora no, pero me voy a poner a pensarte un apodo. Veo que, sin dudas la pasaste de maravillas y me alegro realmente. Un beso.

Cecilia- dijo...

Gracias Marianvs!, pero como me voy a apodar a mi misma?, en todo caso las consulto a mis compañeras de viaje y les cuento que proponen!
besos

Claudio Eugenio Sassaroli dijo...

Gracias por enviarme el mensaje.
Chau.

Ginger dijo...

Ceci, para la próxima fijate si podés llevarme. Yo hablo mucho, cargo pilas de equipaje y no sé poner carteles de venta, ¡pero quiero ir!.
Me alegro mucho que la pasaran tan lindo, nena.

Cecilia- dijo...

Juaaa Ginger, entonces avisame vos y vamos, porque las 4 sería un delirio interminable de palabras y necesitaríamos un trailer!!

Cecilia- dijo...

Ahhhh Marianvus!!!, me apodaron "Cacho", tiene su historia...ya la contaré :)

LORD MARIANVS dijo...

Y ya que estamos con "Cacho" - que me suena a nombre de un tachero muy afín a la muzzarella y a los burros - te voy a poner "Rolando Rivas"...

A Diagonal 7 y Pueyrredón por favor... no tengo cambio, le aviso.

Cecilia- dijo...

Jajaja no Marianvs, no serviría de tachera en capital jamás. Cacho tiene dos orígenes, uno es mi vestimenta habitual, poca pollera, pero ahora estoy intentando, aunque como soy bastante torpe engancho las medias y queda espantoso. Por otra parte tengo buenos amigos varones, y fue uno de ellos quien me puso "Cacho", una vez nos preguntaron: ¿qué pasa entre ustedes?, y él respondió: "Nada, si es Cacho", dándome entidad de "amiga/o. Y quedó el Cacho en ese grupo.

Claudio Eugenio Sassaroli dijo...

Espero que no te enoje el que haya cambiado formato y color del blog,después de el tiempo que te insumieron los ajustes.Lo tuve muy en cuenta y fue lo que me dolió del cambio.Pero ya no quiero más oscuridad,difuminados ni tonos tristes ni lánguidos;hasta es probable que no siga más escribiendo:no parece tener demasiado caso ni interesar bastante;es probable que no sea realmente bueno:los contenidos de lo que escribo no me molestan sino que me irritan las formas,las mías.Y a veces la forma es más importante que la sustancia.Escribo con un estilo que ya no soporto.En fin...espero no te disgustes,sólo esto,y,llegado el caso,sabré recuperar la plantilla sobre la que trabajamos:presté atención a lo que hacías y aprendí,eso no se pierde.
Hasta leernos y un saludo.

Cecilia- dijo...

Claudio!!, como me voy a ofender?, es TU blog y si aprendiste algo genial!.Por otra parte el blog no debe ser "exitoso", al menos yo lo hago para mi, con las cosas que tengo ganas de compartir, después si se enganchan o no es relativo. Yo disfruto el gusto de haberlas publicado. Y no lo tomocomo una obligación, de hecho ando bastante vaga.
besitos

Julia dijo...

Hola!
Soy julia pacho del ide (?)
Hace mucho que pasé y lo leí todo, ahora justo que acabo de hacer un blog pasé de nuevo.
Morí de la risa con el relato de ese viaje, podrías hacer un libro con crónicas de viajes salidas, etc, que te iría bastante bien me parece, aunque por acá te podemos leer gratis ajaj.

Besos, algún día nos animaremos a seguir tus coreografías salseñas.

Cecilia- dijo...

Juli!!!!! que lindo leerteeee, gracias por pasar!.Ya bailaremos juntas,ustedes organicen que yo preparo coreos!!!...o les aviso cuando ande haciendo papelones por algun boliche platense :)
besotesss a todosss